1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo bailo con mi canción y no con la que me tocan.
Yo no soy la libertad, pero si el que la provoca.
Si ya conozco el camino, para qué voy a andar acostado.
Si la libertad me gusta, para qué voy a vivir de esclavo.
Elegir, yo siempre elijo más que por mi por mi hermano.
Y si he elegido ser águila fue por amor al gusano.
Prefiero seguir a pie y no en caballo prestado, alguien por una manzana, por siempre quedó endeudado.
El día que yo me muera no habrá que usar la balanza pues para velar a un cantor con una milonga, alcanza.